El 25 de octubre, el huracán Otis, tocó tierra en el Puerto de Acapulco en Guerrero; siendo la primer tormenta de categoría 5 en el Pacífico mexicano, ha afectado infraestructuras dejando un daño a infraestructuras críticas como hospitales, escuelas, puertos y aeropuertos, sufrieron daños significativos.

El principal impacto de Otis se sintió en Acapulco y sus alrededores, lo que resultó en una considerable destrucción, especialmente en la costa del estado y en zonas montañosas cercanas donde poblaciones vulnerables enfrentaron fuertes vientos y lluvias intensas.

El 31 de octubre, la Coordinación Nacional de Protección Civil declaró estado de emergencia en Acapulco de Juárez y Coyuca de Benítez, activando asistencia del Programa para la Atención de Emergencias por Amenazas Naturales. Debido a la extensión de la zona de impacto el estado reporta que sigue habiendo zonas que se encuentran incomunicadas. Se ha establecido un puente aéreo humanitario, transporte de insumos y personal de emergencia en buques de la Marina, y convoyes humanitarios por tierra.

Frente a esto se han establecido puentes aéreos y terrestres para asistencia humanitaria. La autopista Acapulco-Ciudad de México ya opera con normalidad. Trabajadores electricistas aspiran restablecer la energía al 85% en todo el estado próximamente.

El paso del huracán Otis ha dejado a Acapulco con serios desafíos. El acceso a agua potable y saneamiento se ha vuelto complicado, y numerosas familias han perdido sus hogares. Los albergues temporales, que funcionan más como comedores, presentan riesgos de protección.

La infraestructura gubernamental ha sufrido daños significativos, dificultando la denuncia y asistencia en casos de vulneración de derechos. La Secretaría de Salud reporta que 120 establecimientos de salud han sido afectados, y el 80% de la infraestructura hotelera ha sufrido daños. Hasta ahora, se ha reportado que 273,844 viviendas han sufrido algún grado de afectación. Actualmente, hay refugios temporales en Acapulco y Coyuca de Benitez alojando a un total de 1,620 personas.

Aún no se tiene un número estimado de personas desplazadas internamente por el huracán Otis, pero sus efectos se sienten en todos los ámbitos, incluyendo la educación. La Secretaría de Educación de Guerrero ha suspendido las actividades académicas del 30 de octubre al 3 de noviembre en Acapulco y Coyuca de Benítez.

Guerrero cuenta con 10,513 escuelas de educación básica y 875 planteles de educación media superior, con una matrícula total de 920,201 alumnos. El Instituto Guerrerense de la Infraestructura Física Educativa estima que 33 planteles han sufrido daños, afectando a un total de 23,437 estudiantes de todos los niveles educativos. Sin embargo, hasta ahora solo se ha podido hacer una revisión presencial a 5 planteles de educación básica, lo que sugiere que el número de instituciones y estudiantes afectados podría ser mayor.