El presidente Donald Trump ha intensificado su postura contra México, exigiendo el cumplimiento del Tratado de Aguas de 1944. Según Trump, México debe a Texas 1.3 millones de acres-pies de agua, pero hasta ahora ha entregado menos del 30% del volumen requerido para el ciclo que concluye en octubre.

El tratado, firmado en 1944, regula la distribución de agua entre ambos países. México debe entregar 1.75 millones de acres-pies de agua a Estados Unidos cada cinco años, mientras que EE.UU. entrega 1.5 millones de pies anuales del río Colorado a México. Sin embargo, México enfrenta una sequía histórica que ha reducido los niveles de las principales presas, como La Boquilla y Francisco I. Madero, complicando el cumplimiento de sus obligaciones.

Trump ha amenazado con imponer aranceles y sanciones si México no cumple, calificando la situación como “muy injusta” para los agricultores texanos. Además, ha señalado que la falta de agua ha afectado gravemente a la economía local, incluyendo el cierre de la última azucarera de Texas en 2024.

Por su parte, el gobierno mexicano ha señalado que está trabajando en medidas para cumplir con el tratado, incluyendo la tecnificación del riego y negociaciones a través de la Comisión Internacional de Límites y Aguas. Sin embargo, la situación sigue siendo crítica, y la falta de cumplimiento podría tener repercusiones económicas y diplomáticas significativas para México.