Un innovador modelo de inteligencia artificial desarrollado por investigadores de la Universidad del Sur de California (USC) ofrece una herramienta poderosa para medir el ritmo del envejecimiento cerebral y anticipar el deterioro cognitivo, incluso antes de que aparezcan los síntomas. Este avance se basa en una red neuronal tridimensional (3D-CNN) que analiza imágenes de resonancia magnética para predecir con gran precisión los cambios progresivos en el cerebro.
El estudio, que incluye más de 2,000 imágenes de adultos cognitivamente sanos, revela que un ritmo acelerado de envejecimiento cerebral está directamente relacionado con el deterioro de funciones cognitivas como la memoria y la velocidad de procesamiento. A diferencia de métodos tradicionales que se limitaban a calcular una “edad cerebral” estática, este modelo longitudinal (LM) captura el proceso de envejecimiento en movimiento, ofreciendo una perspectiva más dinámica y completa.

Hasta ahora, estimar el envejecimiento cerebral se basaba en parámetros indirectos como la edad cronológica o pruebas de sangre, herramientas que carecían de precisión para detectar cambios específicos en el cerebro. Este nuevo enfoque podría transformar cómo se diagnostican y tratan enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer.
El avance promete abrir nuevas puertas en el diseño de terapias personalizadas y estrategias preventivas, marcando un hito en el campo de la salud y la inteligencia artificial. Un paso más hacia un futuro donde los modelos predictivos nos permitan proteger la función cognitiva de las personas de manera más eficaz.