Una función que regaló sonrisas, sueños y esperanza en pantalla grande.

Más de 200 niños de las comunidades de Olintepec y Anenecuilco vivieron una jornada mágica al ser invitados por Fundación Cinépolis a disfrutar la capital del cine. Entre risas, emoción y ojos brillando frente a la pantalla, los pequeños disfrutaron de película, palomitas y refresco, todo completamente gratuito. Esta gestión fue posible gracias al impulso del síndico municipal, Pablo Molina Mora, con el respaldo del Ayuntamiento de Ayala encabezado por la presidenta Nayeli Mares, quien se sumó aportando el transporte para que esta experiencia fuera una realidad.

Dos escuelas fueron las afortunadas en esta aventura cinematográfica que unió voluntades entre la sociedad civil organizada y las autoridades locales. Lo que inició como una gestión, terminó convirtiéndose en un acto de amor comunitario: una muestra de que cuando se trabaja con el corazón, los sueños se proyectan en pantalla grande. Porque a veces, una simple función de cine puede encender la chispa que inspira a soñar más alto.

En Ayala, los sueños también se filman… y hoy, se proyectaron con el brillo de 200 sonrisas.