CuautlaHoy

Revista digital de la región oriente de Morelos.

RODADA CICLISTA POR LOS LIBROS RECORRE LAS BIBLIOTECAS DE CUAUTLA EN EL MARCO DEL 38 ANIVERSARIO DE LA BIBLIOTECA ABRAHAM RIVERA SANDOVAL.

En el marco del 38 aniversario de la Biblioteca Pública Prof. Abraham Rivera Sandoval, se llevó a cabo con ferviente entusiasmo la Rodada Ciclista por los Libros, una actividad cultural y deportiva que consistió en visitar las cinco bibliotecas activas del municipio de Cuautla. Este evento fue organizado por el Ayuntamiento de Cuautla, encabezado por el alcalde Jesús Corona Damián, a través del Departamento de Patrimonio Histórico y Bibliotecas, bajo la dirección del Prof. José Luis Camal Ugarte, en coordinación con Ricardo Rojas, director de la empresa turística Cocoyoc Adventure y miembro activo de AMVIAC.

La rodada dio inicio en la Biblioteca Abraham Rivera Sandoval, desde donde los ciclistas partieron hacia su primera parada: la Biblioteca Padre Patricio Dillon, ubicada en la comunidad de Tetelcingo. Posteriormente, cruzaron hacia el fraccionamiento Brisas y rodaron por la ciclovía hasta llegar a la estación de bomberos en Cuautlixco, donde visitaron la Biblioteca Gral. Emiliano Zapata, ubicada en el jacalón sobre la Avenida Insurgentes. El recorrido continuó hacia Agua Hedionda, pasando por el Quinto Regimiento Mecanizado, para llegar al tercer punto: la Biblioteca Lic. Juan José Astigarraga Sánchez, en la colonia 5 de Febrero. De ahí, los participantes se dirigieron a la Biblioteca Sitio de Cuautla 1812, frente a Gualupita, para finalmente retornar al punto de partida en la Biblioteca Abraham Rivera Sandoval.

En cada una de las bibliotecas visitadas, los ciclistas recibieron un distintivo conmemorativo como recuerdo de su participación en esta significativa actividad. Al concluir el recorrido, se integraron al evento cultural organizado dentro del domo de los Patios del Tren Escénico, donde se llevaron a cabo diversas actividades alusivas al aniversario de la biblioteca. La Rodada Ciclista por los Libros no solo promovió la lectura y el conocimiento del patrimonio bibliográfico de Cuautla, sino que también fortaleció los lazos entre la comunidad y sus espacios culturales.