El gobernador de Michoacán Silvano Aureoles, se plantó afuera del Palacio Nacional por cuatro horas en espera de ser atendido por el mandatario nacional, Andrés Manuel López Obrador, sin embargo no tuvo éxito.
El objetivo del gobernador de Michoacán, era presentar las pruebas correspondientes a los señalamientos sobre los nexos entre Morena y el crimen organizado.
Al final de la espera, Silvano Aureoles expuso que no se trata de un tema político, sino de un asunto de seguridad para el estado y para el país, pues regresará el narco gobierno.
A través de su cuenta de Facebook y Twitter público “Le pido al presidente que recapacite, sé que no quiere un país gobernado por el narco y, con lo sucedido el 6 de junio, México va por ese camino. Si no actuamos a tiempo, lo vamos a lamentar”.
Y agregó, que acudirá a la Suprema Corte de Justicia así como instancias internacionales para denunciar la intervención del crimen organizado en las pasadas elecciones del 6 de junio.
Por último dejó en claro que no desistirá hasta demostrar los dichos por su parte.